10/6/10

A veces una se plantea si irse de vacaciones es bueno. Sobre todo cuanto te encuentras con una papeleta de tres pares de narices a la vuelta de tu descanso.

Como ya sabéis, uno de los asuntos peliagudos con los que me codeo en el trabajo es en relación con un cliente tailandés. Por si no lo sabíais, los tailandeses son la gente con mayor capacidad para dar por saco de todo el mundo. Doy fe, digan lo que digan del relax, del budismo y de su puñetera madre.

Gran pastel el que me he encontrado a mi vuelta. Cosas de la vida, a veces, incluso en tus días libres, te pueden llamar del trabajo para cosas estúpidas que bien podrían esperar a tu vuelta para solucionarse. ¿Pero para lo importante? Noooooo, para eso no molestamos. Que se le ponga el corazón en un puño a su vuelta de las merecidas vacaciones. Porque total, la parte de la coordinación del audio de Thai es cosa mía, para qué mantenerme informada de lo que sucede.

Vamos a concurso a riesgo de perder o mantener el cliente y se decide todo lo relacionado con el audio en mi ausencia, nadie me copia en ningún correo, nadie me informa de nada a mi vuelta y sólo cuando llamo a un compañero a la oficina de Inglaterra el lunes a mediodía me empiezo a enterar de la movida. Y cuando me empiezo a enterar, me dicen una cosa, a la mañana siguiente la contraria y yo de intermediaria con una tercera empresa encargada de las selecciones de audio Thai (hay muchísimas movidas por temas de derechos y demás y tiene que ser alguien conocer de la legislación y de los permisos quien se encargue de todo) pidiendo que me entregaran hoy lo imposible. Evidentemente, sólo ha llegado parte de la información, con lo que si no se resuelve todo de aquí a mañana por la tarde a mí me da un yuyu y medio dos.

Luego viene la segunda parte, cuando descubro que un compañero se ofreció la semana pasada a ponerse en contacto en mi nombre con esta empresa para ir agilizando los trámites. Y la tercera parte, cuando mi jefa le dice a este compañero que ella se encarga de todo.

Y la cuarta parte, cuando, evidentemente, nadie se ha encargado de los trámites en mi nombre durante mis vacaciones, y cuando yo tengo que callarme la boca, comerme el marrón con patatas y pedir a todos los santos que no lluevan metralletas, porque con la primera que pille me lío a tiros en la oficina. Suslojuro.

3 comentarios:

  1. Tengo un bate de Baseball en casa, si quieres te lo presto...

    Y ya sin coñas, mucho animo guapetona...

    ResponderEliminar
  2. Lamadrequelosparió... luegodicenqueunadice...

    ResponderEliminar
  3. Yo que tu les soltaba a AJ versión smoke...

    ResponderEliminar